Loving County, el condado vacío

La carretera 302 de Texas recorre el oeste del estado en una sucesión de aburridísimas líneas rectas. Su origen se encuentra en la ciudad de Odessa y durante decenas de kilómetros atraviesa menos de media docena de pueblos polvorientos, el más grande de los cuales apenas cuenta con 5.000 habitantes. 125 kilómetros después de Odessa la carretera se cruza por segunda vez con otro camino digno de tal nombre, la County Road 300, una lengua de asfalto que discurre hacia el Norte hasta casi alcanzar la frontera con Nuevo México. Si has llegado hasta aquí estás en Mentone, la sede del condado de Loving, el más despoblado de todo Estados Unidos. En un radio de decenas de kilómetros no hay nada salvo una gasolinera y una cafetería. Las carreteras en Mentone son para largarse cuanto antes del pueblo.

La entrada a Mentone (fuente). Uno que lo visitó hace poco dice que lo más relevante que le sucedió fue ver un lagarto a las 14:37 en una de las tres calles del pueblo.

El Condado de Loving está tan vacío que hace que el Groenlandia parezca Singapur. En sus 1.700 kilómetros cuadrados cuenta con 7o habitantes, o, por decirlo de otra manera, cada humano cuenta con 25 km² para él solo. Los habitantes de Mentone (19) suelen decir de su propio pueblo que hace que Archer City parezca Mexico City. Y posiblemente se quedan cortos. El pueblo tiene un café del que en ocasiones se puede decir que está abierto y una gasolinera para llenar el depósito y salir corriendo de allí. Antes había un colegio pero cerró en los años setenta. En los ochenta la prisión del condado hizo lo propio y fue trasladada al pueblo más cercano, Pecos, situado a cuarenta y tantos kilómetros de allí. No es de extrañar, teniendo en cuenta que desde 1893, fecha de la creación del condado, apenas 200 casos han pasado por los juzgados de Mentone.

Localización del Condado de Loving en Texas. Mentone es la única comunidad que existe allí.

Cuando uno quiere ir a la farmacia en Mentone, se sube al coche y recorre 40 kilómetros hasta el pueblo más cercano. Lo mismo si quiere comprar comida para perros o cualquier otra cosa que no sea gasolina. O si quiere sacar dinero del banco. O sencillamente morirse tranquilamente y que lo entierren. No hay bancos, tiendas, cementerios, médicos o farmacias en Mentone. El aislamiento del pueblo es tan legendario entre sus escasísimos habitantes, que han creado una serie de eslóganes para el pueblo. Por ejemplo «Los humanos nos gustan», «Trae tu propia agua», «No estamos en el quinto pino, pero lo puedes ver desde aquí» y, mi favorito, «El pueblo sin abogados».

Un animadísimo vecindario (fuente)

La Historia de Mentone y el Condado de Loving, sin embargo, tiene ciertas curiosidades dignas de relatar. Por ejemplo, Loving fue el primer condado texano en escoger como Sheriff a una mujer, en 1945. Duró dos años en el cargo, en una época en la que Mentone contaba con nada menos que 150 habitantes, y el condado con casi seiscientos, la mayoría empleados de compañías petrolíferas. Desde aquella época hasta ahora el condado ha ido perdiendo habitantes de forma incesante, hasta quedarse en los setenta de hoy en día.

Muérete de asco (fuente)

En las elecciones a Sheriff de 2004 los dos candidatos acudieron a la fiesta de campaña del otro, junto con la mayoría de los votantes censados. No suele haber nunca problemas en el condado, pero por si acaso el Sheriff patrulla con un AK-47 y dos escopetas. Nunca se sabe. Lo cierto es que en los últimos años sólo ha tenido que poner en busca y captura a un grupo de personas que intentaron tomar el pueblo. Básicamente eran tres libertarians que afirmaron haber comprado propiedades en el condado y tener la intención de mudarse junto con sus seguidores para, fundamentalmente, ganar las elecciones y eliminar en el condado todas «regulaciones opresivas», lo que incluía legalizar el juego, la prostitución, el tráfico de drogas, el canibalismo (!) y el tráfico de órganos, siempre que se tratara de un acuerdo voluntario entre adultos libres. El caso es que se presentaron en el pueblo diciendo que habían comprado tierras que, según comprobó el registrador del censo (que también hace de Sheriff y de recaudador de impuestos, entre otros muchos trabajos) no habían cambiado de manos, así que ordenó su busca y captura (a sí mismo) para convocarles a un juicio de faltas, mientras los tres libertinos huían del Estado. No han vuelto, que se sepa. Ni ellos ni nadie que se haya ido alguna vez.

Billy Burt Hopper, Sheriff del Condado de Loving, en los límites de su jurisdicción. Debajo, los campos deportivos de la vieja escuela, abandonados.

Mas info en inglés: Wikipedia, New York Times, TexasEscapes.com (2). Página oficial del Condado de Loving.

Sobre cosas vacías en Texas ya se habló aquí en Una tienda de Prada en mitad de ninguna parte.